

El sitio arqueológico Uaxactun fue testigo de unos de los fenómenos naturales más importantes de Guatemala, siendo este el Equinoccio de primavera que se da una vez al año. Es un evento en el cual el día y la noche tienen una duración igual en todos los lugares de la tierra, excepto en los polos. Guías espirituales, sacerdotes mayas, tatas, abuelos y nanas recibieron este fenómeno natural con una ceremonia maya que inicio a las cinco de la mañana. En el observatorio astronómico de UAXATÚN, el sol nace tras de una de las estructuras de la plaza del grupo E, irradiando luz en el contorno de la misma. Esta es una fecha señalada por antiguas culturas especialmente por los mayas, como poderosa para un encuentro entre el hombre y las fuerzas de la naturaleza. La Ajq ´ij (guía espiritual) Juan Chiriz, expresó que el avance alcanzado por la civilización Maya, ha contribuido a construir una nueva visión y concepción sobre el destino de la madre tierra, como órgano vivo y de los seres humanos para el proceso del buen vivir de los pueblos que habitan el planeta. Durante los tres días del evento participan varios grupos folclóricos de la región, el Juego de Pelota Maya, Ceremonias Mayas dirigidas por guías espirituales, investigaciones arqueológicas explicadas por expertos en la materia, el Baile del Venado, tours en el sitio, y otras actividades.